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Automóviles y el conducir

Volver a conducir

Hay más intención en tener dos pares de ruedas que solo ir de aquí a allá. Subirse a un automóvil es un boleto a la libertad, la independencia y la aventura.

Para las personas con parálisis reciente, conducir es una manera segura de volver a la actividad. Pero ¿puede usted hacerlo? ¿Puede una persona con parálisis estar detrás del volante y manejar el vehículo y el tráfico?

Conducir es bastante posible para muchas personas con parálisis, incluso las que tienen la función de manos y brazos muy limitada. En la actualidad, hay en el mercado una amplia gama de equipos adaptativos para conducir y modificaciones para los vehículos.

Conducir con una discapacidad suele significar aprender de nuevo a conducir. Las normas de tránsito no cambian, pero los controles sí. Según las necesidades específicas de la persona, un vehículo adaptado puede incluir lo siguiente:

  • Controles manuales para frenar y acelerar
  • Dispositivos de asistencia eléctricos para facilitar el uso del volante
  • Botones para arrancar y cambios de marchas táctiles
  • Asientos de conductor regulables
  • Dispositivos automáticos para abrir las puertas
  • Palanca de mandos para personas con función extremadamente limitada en las manos

Para una persona que ha sufrido un accidente cerebrovascular, se puede fijar al volante una perilla que permite conducir con una sola mano. Se puede adaptar un pedal de acelerador a la izquierda si el pie derecho no puede operarlo.

Evaluación de conducción

El primer paso del proceso es someterse a una evaluación por parte de un instructor de conducción calificado. Esto determinará su configuración básica de conducción, modificaciones específicas y equipos de conducción que se adapten a sus necesidades.

La evaluación también considera lo siguiente:

  • Examen de la visión y la fuerza muscular
  • Flexibilidad y rango de movimiento
  • Coordinación entre manos y ojos y tiempo de reacción
  • Juicio y toma de decisiones
  • Capacidad para manejar equipos adaptados

Un evaluador también es posible que tenga en cuenta los medicamentos que el potencial conductor toma.

Para buscar un evaluador calificado, visite su centro de rehabilitación local o póngase en contacto con la Asociación de Especialistas en Rehabilitación de Conductores (ADED), que mantiene una lista de especialistas certificados a lo largo de todo el país (en inglés).

Y para obtener una nueva licencia de conducir, la mayoría de los estados requieren un permiso de aprendiz o de conducir válido para hacer una evaluación en la carretera. A nadie se le puede negar la oportunidad de solicitar un permiso o licencia de conducir porque tenga una discapacidad, pero es posible que reciba una licencia limitada con base en los dispositivos adaptativos que necesite.

Cómo seleccionar un vehículo

Una vez que el departamento de vehículos motorizados de su estado y la evaluación le den permiso, es hora de pensar en los vehículos que se adecuan a sus capacidades y necesidades.

Elegir el automóvil correcto puede llevarlo a un medio de transporte más práctico que el que podría haber elegido antes de la parálisis. Por ejemplo, los automóviles deportivos para dos pasajeros pueden ser adecuados para la imagen que usted tiene de sí mismo, pero están bien abajo en la escala de practicidad. Las minicamionetas, esas camionetas de familias que juró evitar, son mucho más útiles.

Resulta útil conectarse con otras personas con discapacidades similares para ver qué conducen. Después, asegúrese de colaborar con el evaluador y un distribuidor calificado de modificaciones de vehículos.

Las personas que se sientan en sus sillas de ruedas para conducir o viajar en minicamionetas o camionetas grandes necesitan amarres manuales o bloqueos eléctricos por seguridad. Los sistemas manuales suelen requerir ayuda para entrar y salir. Las unidades eléctricas ofrecen más independencia: uno simplemente se ubica en su lugar y la silla automáticamente se bloquea.

Como no se puede operar una camioneta desde un scooter, los usuarios deben tener capacidad para poder transferirse al asiento al vehículo para conducir. Hay asientos electrónicos disponibles que ayudan con la transferencia.

Consejos para encontrar el vehículo adecuado para sus necesidades

Las preguntas y consejos siguientes pueden ayudarle con el proceso de selección de un vehículo o con la adaptación de uno que usted ya tenga:

  • ¿El equipo adaptativo necesario requiere una camioneta o con un automóvil para pasajeros más pequeño alcanza? En otras palabras, ¿conducirá desde una silla de ruedas o se puede transferir al asiento del automóvil? Si puede transferirse a un automóvil, sus opciones son mucho más amplias.
  • ¿Usted entrará bien en una minicamioneta? Una persona puede sentarse más alta en la silla de ruedas y es posible que llegue a tocar al techo interior.
  • ¿Puede el vehículo adaptar los controles manuales u otros equipos necesarios para conducir?
  • ¿Habrá suficiente espacio para otros pasajeros una vez que el vehículo se modifique?
  • ¿Hay suficiente espacio de estacionamiento en la casa o el trabajo para el vehículo y para cargar/descargar una silla de ruedas o un caminador? Tenga presente que es posible que las camionetas grandes no quepan en su garaje o los garajes públicos o incluso en determinados espacios de estacionamiento.
  • Si un tercero pagará el vehículo, los dispositivos adaptativos o las modificaciones, ¿hay alguna limitación o restricción con respecto a lo que se cubre? Obtenga una declaración por escrito de lo que el organismo financiador pagará antes de hacer su compra.
  • Si va a adaptar una camioneta usada o un vehículo familiar que ya tenía, asegúrese de que el técnico tenga mucha experiencia.
  • No todos los elevadores son iguales; algunos simplemente no serán adecuados. Además, algunos elevadores están construidos para usuarios de sillas de ruedas y es posible que quienes usan scooters no puedan usarlos.

El costo de modificar un vehículo varía enormemente. Un vehículo nuevo modificado con equipos adaptativos puede costar desde $20,000 hasta $80,000.

Sea un comprador experto: investigue sobre asistencia financiera pública y privada. Póngase en contacto con el departamento de rehabilitación vocacional de su estado u otro organismo que proporcione servicios vocacionales y, si corresponde, con el Departamento de Asuntos de Veteranos.

Además, considere lo siguiente para ayudarse a financiar su vehículo nuevo o adaptado:

  • Algunos grupos sin fines de lucro que defienden a personas con discapacidades tienen programas de subsidios que ayudan con los dispositivos de adaptación.
  • Si tiene un seguro de salud privado o compensación de trabajadores, puede que tenga cobertura para dispositivos adaptativos y modificaciones de vehículos. Consulte con su agente de seguros.
  • Varios fabricantes de autos, como Toyota, Chrysler, Ford y General Motors, tienen planes de descuentos o de financiación para vehículos que van a ser modificados.
  • Algunos estados eximen del impuesto a las ventas para dispositivos adaptativos si es un doctor quien indica su uso. También puede que usted sea elegible para ahorros relacionados con gastos médicos sobre su declaración de impuestos a los ingresos federales. Consulte con un especialista en impuestos.

Busque un distribuidor calificado para modificar su vehículo. Pregunte, pida credenciales y referencias.

  • ¿Trabajan con evaluadores?
  • ¿Examinarán su vehículo antes de que usted lo compre?
  • ¿Necesitan la prescripción de un doctor u otro especialista en evaluación de conducción?
  • ¿Ofrecen capacitación para usar el equipo?
  • ¿Tienen servicio de asistencia? ¿Cuánto cuesta? ¿Cuánto tardarán en hacer el trabajo? ¿Cuál es la garantía?

Conducción con palanca de mando

Las palancas de mando han permitido que personas que viven con cuadriplejia salgan a la calle. Los sistemas de palanca de mandos para automóviles han estado en el mercado lo suficiente como para demostrar su seguridad, confiabilidad y desempeño.

Pueden ser un sistema mecánico/hidráulico (como el de los aviones) o electrónico (como una PlayStation). Es posible que todo dependa de su nivel de comodidad con los aparatos electrónicos y cualquier preocupación con respecto a sufrir un total corte de energía a 70 mph.

Una compañía de California llamada dSi adapta de manera personalizada su sistema mecánico Scott, a cada conductor. La firma dice que el mecánico es más confiable y refinado que el electrónico. Prefieren usar camionetas Ford grandes y se mantienen en contacto con conductores (incluso algunos con lesiones medulares hasta C4/C5) que han circulado más de 300,000 millas con el sistema.

EMC ofrece una solución electrónica llamada Aevit 2.0. Una de las ventajas principales es que Aevit no necesita modificación en los conjuntos originales de frenos, volante y bolsas de aire. Esto significa que el vehículo se puede revender sin las modificaciones. Además, un sistema Aevit puede ser operado también por un conductor no discapacitado. El sistema Scott, por el contrario, solo funciona con la palanca de mando.

Si está pensando en conducir con una palanca de mando, necesitará la referencia de un instructor de conducción. Tampoco debe subestimarse la importancia de la capacitación.

Un sistema de palanca de mando, puede costar entre $40,000 y $65,000, más el costo del vehículo. Hay terceros, incluidos seguros privados, rehabilitación ocupacional y Asuntos de Veteranos (VA) que han pagado estas modificaciones, por lo que debe investigar sus opciones. Para más información, pida a cada fabricante referencias de usuarios y, si es posible, compruebe cada sistema usted mismo.

Descuentos en vehículos

Ford Mobility Motoring ofrece hasta $1000 de asistencia en el costo de equipos adaptativos en un vehículo Ford, Lincoln o Mercury nuevo. Centro de atención al cliente de Ford Mobility Motoring.

El Programa de movilidad de GM (en inglés) con OnStar ofrece un reembolso de hasta $1000 ($1200 sobre camionetas Chevy Express/GMC Savana) más dos años adicionales del servicio de seguridad y protección OnStar sobre cada nuevo vehículo de GM elegible (excepto Cadillac).

El Programa de movilidad de Toyota ofrece un reembolso de hasta $1000 para equipos adaptativos o conversiones de repuesto instalados en cualquier Toyota elegible comprado o arrendado.

El Chrysler Automobility Program ofrece hasta $1000 en asistencia financiera para la instalación de equipos adaptativos en vehículos Chrysler, Jeep y Dodge nuevos.

El Programa de movilidad de Hyundai ofrece $1000 para el costo de equipos adaptativos. Consulte al concesionario para obtener más información.

El Programa de movilidad de Volvo (en inglés) reembolsa hasta $1000 por el costo de equipos adaptativos agregados a un nuevo Volvo. Centro Mobility by Volvo.

Recursos

Si necesita más información sobre los vehículos adaptados o tiene una pregunta específica, nuestros especialistas en información están disponibles de lunes a viernes de 9am a 5pm ET, 800-539-7309 (línea gratuita dentro de los EE. UU.) o 973-379-2690 (internacional).

Adicionalmente, la Fundación Reeve mantiene una hoja informativa sobre manejar con una discapacidad con recursos adicionales de fuentes confiables. Chequee nuestro repositorio de hojas de información sobre cientos de temas como los recursos disponibles su estado/ país o enfermedades secundarias de la parálisis.

Le recomendamos que se contacte con grupos de apoyo y organizaciones, incluyendo: